“Somos referentes nacionales en atención quirúrgica y formación médica
El servicio del es uno de los más grandes de la ciudad y del país. Cuenta en su equipo con destacados especialistas en diferentes patologías. La capacitación de residentes es uno de los objetivos centrales
E l servicio de Cirugía del Hospital Pirovano es uno de los más grandes de la ciudad de Buenos Aires y del país en su especialidad. Cuenta con cincuenta y cinco camas dividas en dos salas, una de mujeres y otra de hombres. En la actualidad, su plantel está integrado por dieciséis médicos de planta y nueve residentes con su jefe.
Desde hace quince años, el Dr. Pablo Sisco es el responsable de la División Cirugía: “Hemos logrado que todos disfruten de su lugar de trabajo. En primer lugar, venimos todos los días con compromiso y entrega. Pero nuestro gran éxito es haber logrado que los jóvenes colegas tomen este hospital como referente y primera elección para la residencia en cirugía. En septiembre, sumaremos cuatro residentes más de primer año, otros cuatro rotantes para capacitarse, un instructor y un jefe. Es un indicador de la actividad del servicio y de la calidad de los procedimientos realizados”.
Dos objetivos centrales
El Dr. Sisco define con claridad los dos objetivos centrales de la división que dirige: “En primer lugar, buscamos el bienestar de los pacientes y brindar un buen servicio a la comunidad; y esto es posible porque todos tenemos la vocación de ser médicos. En segundo lugar, capacitarnos continuamente y capacitar a nuestros residentes, en ese sentido buscamos reducirles la cantidad de cargas administrativas que hoy, lamentablemente, llevan adelante”.
Capacidad de gestión
La sala de mujeres está a cargo de la Dra. Nora Perrone, mientras que el Dr. Leonardo Dimasi es el responsable de la de hombres. “Antes el servicio era aún más grande, pero se hicieron algunas modificaciones para poder tener depósito propio. Durante la pandemia se intentó reducir la cantidad de camas, pero el servicio se negó a sabiendas de que posteriormente hubiese sido muy difícil recuperar toda la capacidad”, suma el Dr. Pablo Sisco. Más allá de los logros, han debido sortear algunas dificultades que el profesional detalla: “En la logística interna conseguimos consensuar con el equipo de terapia intensiva una dinámica que nos permita disponibilidad continua de camas, para así disminuir a su mínima expresión la suspensión de intervenciones. También, tenemos un gran apoyo del subdirector, quien toma una actitud muy activa para estimular la actividad de los anestesiólogos. Por otro lado, ante la falta de cierto equipamiento, recientemente logramos con gestiones propias ante el Ministerio de Salud del GCBA, que se nos provea de un aparato moderno de última generación de cirugía laparoscópica; una mesa de operaciones; una lámpara cialítica; tres electrobisturíes, uno de ellos especialmente para la cirugía de órganos sólidos”.
“Más de treinta cirugías semanales”
El servicio trabaja en distintas patologías, cada una tiene sus profesionales de referencia. “Hacemos cirugías de tórax, patologías de cirugía benigna y traumatismos. Además, se operan tumores, el Dr. Amadeo Sánchez Andía y el Dr. Alfredo Bargnia son los responsables; en esófago y estómago este hospital es histórica[1]mente modelo porque hubo jefes que fueron grande maestros, y capacitaron a quienes hoy son referentes en el ámbito nacional, como el Dr. Dimasi y la Dra. Carmen Spataro”, aporta Sisco.
“Nuestro gran éxito es haber logrado que los jóvenes colegas tomen este hospital como referente para sus residencias”
También se destacan algunas especialidades por la gran cantidad de casos por derivación que reciben: “En cirugía coloproctológica, de intestino delgado y grueso tenemos lista de espera y damos prioridad a los pacientes oncológicos. Nuestra principal tarea es la patología de hígado, vía biliar y páncreas cuyos expertos son los Dres. Guido Santojanni, Jorge Devoto y yo. Cada día es más frecuente la cirugía de paredes abdominales y la Dra. Geraldine Quintana es su referente”.
“Contamos con un especialista en fístula digestiva a nivel nacional, como el Dr. Daniel Wainstein, llegado del Hospital Tornú. Del equipo del Hospital Marie Curie, recibimos al Dr. Diego Bendersky. La sección de Cabeza y Cuello no opera en nuestros quirófanos, pero pertenece a la división”.
Cada semana en el servicio se realiza un promedio de treinta cirugías. De estas, los lunes, miércoles y viernes se llevan adelante un mínimo de seis con anestesia general y cuatro o cinco intervenciones menores. El equipo se reúne periódicamente para poner en común el trabajo. “Tenemos un día por semana en el que nos juntamos, hablamos y discutimos en la búsqueda de mejorar nuestro funcionamiento. En ese momento, no hay jefes, somos todos iguales, las ideas nuevas se suman y se deben cumplir”, comenta el Dr. Sisco.
Por otra parte, los jueves por la mañana se organiza un ateneo para discutir los casos más complejos. “Previamente, realizamos la recorrida por el servicio con todo el personal. Lo hacemos, entre otras cosas, para que nuestros residentes tengan contacto con el paciente, porque además del aspecto quirúrgico, que es fundamental, nos ocupamos de que no se descuide el lado humanitario de la medicina”.
“Realizamos un promedio de treinta cirugías por semana”